Le puse la tapa!: artesAna

Hace años, en un viaje de mis papás, me trajeron varias cosas que habían comprado en una chatarra, por el sur. Entre ellas, vino un pie de esas mesitas de los bares de la calle Corrientes: de hierro, con tres patitas trabajadas. Mi papá me entregó el pié, con un caño colocado y las cruzetas para hacer una mesa. En ese momento, yo vivía sola y me armé una mesa de comedor, de 1m de diámetro. Me acuerdo que al caño le hice con masilla epoxi unos firuletes a modo de continuidad con respecto al pie. Lo había pintado de gris y la tapa de madera, tenía un trabajo de pátina simil mármol... No tengo foto digital.. tenia una de rollo, debería scanearla.
El único problema es que al tener una base tan chica, te apoyabas en la mesa y se te venía encima ("nada más y nada menos no?"). Mi papá me contaba que en realidad las originales están montadas sobre una cruz de madera, justamente para la estabilidad.

Entre mudanzas y demás, la tapa no se adonde fue a parar y el pie a un cuarto de depósito de la casa de mi hermano. Cuando hace poco, él se mudó a vivir al sur, tuve que vaciar "mi baulera". Saqué varias cosas, entre ellas el pie de la mesa (que ya ni me acordaba que lo había pintado de negro! jaja) y una mesita de madera, que no me gustaba el pié y que también hace unos años, le había hecho en la tapa un trabajo con venecitas. De estar guardada, estaba toda la pastina levantada, con manchas de óxido, le faltaban venecitas...

Cuando llegó a casa tenía que tomar una decisión... las dos mesas no podían quedarse! Obviamente la de hierro llevaba las de ganar! asi que mi marido, siempre dispuesto (pobre santo!), me cortó las cruzetas de hierro con la moladora, y a la otra mesa le sacó la tapa. La aplicó a la mesa de hierro, y ahí con un destornillador, le levante pastina vieja, completé con venecitas las faltantes y le volvi a dar una mano nueva de pastina blanca.

Así quedo la nueva integrante del balcón! (justo para tomar frio!)